Me he entretenido en repasar los comentarios de meses anteriores tanto en este rincón, como en la luminosa
Las Vegas, digo
Facebook, y es curioso, en realidad se asoman más sindicalistas que trabajadores normales, quiero decir, normales de ir a currar por turnos, hacer relevos o liquidar en la oficina, sobre todo en el
facebook, que
se ha convertido en el tablón de anuncios de nuestros sindicatos. Por cada cinco intervenciones sindicales, hay una de alguien libre y sin ataduras que hable sin efusiones partidistas. Echo de menos preguntas de expendedores confundidos, de gente con problemas que busquen una ayuda en la Red. No es solo
el Lado Oscuro -como decía el añorado
Sacco-, el que se ha convertido en un volcán efervescente de injurias, ya que incluso en
Campsared Blog, participa más gente uniformada que "informados" hay allí. Facebook ha sido tomado al asalto y de lo que se hablaba al principio, de asuntos baladíes sin trascendencia alguna, cosas de expendedores extraviados, se ha pasado a una lucha encarnizada por acaparar el espacio, se ha convertido en la
Colina de la Hamburguesa, un lugar
donde debatir sin fin los mismos inacabables temas por boca de los mismos salvadores. Y total para nada.
Los trabajadores de a pie se han ido de ambos foros debido al insaciable afán colonizador de nuestros sindicatos. Tanto oírse a ellos mismos, que han dejado de escuchar a las personas que importan, los que están al pie del cañón, los que trabajan en las estaciones, los que soportan el rosario obligaciones con cada vez menos ayuda y más agobio, y a menudo mayor incertidumbre.
Está muy bien que nuestros sindicatos intervengan, participen, informen pero de ahí a que sean los protagonistas del baile, creo que no, que no van por ahí nuestros deseos. Y lástima que este Blog no tenga 600 seguidores -aunque fueran anónimos-, que estoy seguro que nuestros sindicatos aparecerían de nuevo con la mejor de sus sonrisas, por que ¡joder!, hay que ser sinceros, por el interés te quiero Andrés, seríamos mucho más apetecibles.
Otra cosa que me ha llamado la atención, sobre todo en este foro, es descubrir
tantos nuevos blogueros con opiniones sindicales, a favor o contrarias a STR, criticándoles que si hacen o dejan de hacer. Se nota que este sindicato lleva años aferrado al poder, como los grandes dictadores, con pocos y rendidos elogios, y muchos detractores desde el limbo criticándolos por los innumerables errores cometidos. ¡Ah, no!, ¡qué STR son nuevos (o casi)!. Lo que ocurre es que empieza a rifarse el territorio y ellos amenazan con quedarse alguna buena parcelita. Pues no hay derecho, deben seguir fuera, sin molestar, sin tan siquiera levantar la voz, para no ruborizar a los otros. Deben desaparecer de este planeta por ser unos buscapleitos sin credibilidad (y defender los intereses del PP. Eso dicen).
A propósito, que no digo yo que no sea compatible, pero raro si es, es lo principal y tal vez único punto que STR tendría que replantearse, si
Santiago Azón -posiblemente bellísima persona
- con su dualidad política beneficia a su sindicato. No me lo imagino yo manifestándose el 1 de mayo por los trabajadores luciendo escarapelas del PP. No sé, me choca. Igual si, a lo mejor es un verso suelto en el partido, ¿Y si se presentara como independiente? ¿Y si renunciara a alguno de los cargos. Lo suyo es lo que se llama dar misa y repitar al mismo tiempo. Me choca, pero bueno, ahí está el
Dr. Jekyll y Mr. Hyde conviviendo hace años con su contradición, o
Vestringe escracheando peperos, o el recordado aleman
Schindler haciendo buenas obras. En fin... pero es raro.
Volviendo al tema. Estos de STR se quieren meter en camisa de once varas; qué se habrán creído. Por un lado decirles que esto es el mundo real, aquí un delegado cuenta más que un amigo; ya está bien de gimotear por que les tratan mal, les boicotean y no les dejan un espacio libre donde aparcar su credo, ¿Qué esperaban? ¿Una banda de música y banderitas? Van a tener que ganarse el espacio a base prestigio, pero también de patadas en las espinillas. Al final los trabajadores son los que ven el juego y van a decidir quien dice la verdad y quien engaña; al final, el trabajo y la competencia son los que dan los frutos y el reconocimiento general.
No obstante esas
buenas personas que últimamente se incorporaron a este Blog,
unos nos advierten -sin interés alguno-, recordándonos lo nocivos y peligrosos que son estos imberbes, y la poca confianza que les debemos tener, -Mas vale lo malo conocido- nos avisan -a ver si luego van a hacer algo con lo que no esteis de acuerdo- Más o menos como han hecho los otros, pero aquellos lo hacían por nuestro bien, estos, seguramente negociarán con vuestras almas, o vaya usted a saber. Que STR parecen buenos como
las FARC, pero fíate de la virgen y no corras, seguramente quieran hipnotizaros y cometer actos impuros, convertiros en zombies sin cerebro; nuestros afiliados en cambio... lo deciden todo, ejem... ellos mismos.
Luego están esos -también sin interés como es lógico- que ponen a caer de un burro a los tradicionales, esos que
ven en STR el advenimiento del mesías y a los antiguos sindicatos nos los pintan poco menos que como a gánsteres de los años 30, vistiendo mocasines blancos y traje a rayas verticales, con matones que te intimidan y te meten cabezas de caballo en la taquilla como no cambies de opinión.
Pues ojo, próximas a celebrarse varias elecciones a
comité de empresa (en provincias con más de 50 trabajadores -ver
art. 66 del ET-), la más inmediata en Madrid -donde se juegan 13 delegados-, se barrunta un revuelo de cuidado, y sin embargo -peculiaridades de la política- puedo anunciar anticipadamente que aquí ganarán todos. Si, victoria general, como en todas las elecciones españolas.
CCOO pese al desplome seguirá siendo mayoría. UGT, orillada estos últimos años, se convertirá en la segunda fuerza (real) después de multiplicar sus delegados, y STR irrumpirá en el panorama con voz y voto y ahora si, mano y apoyos para contradecir -lástima que por poco tiempo- las maniobras de la empresa y los tejemanejes de los otros sindicatos, entiéndase con ello: la cruda realidad.
Veremos lo que dura la pureza con que presentan su candidatura que pretende soliviantar a los grandes quebrando su duopolio de tantos años.
Al final la política es como las relaciones; es muy cansado estar a la
gresca todo el día, y es comprensible que antes o después realicen un ménage à trois para aliviar parte de las tensiones de los últimos meses.
¿Y las rencillas anteriores? Bah, pelillos a la mar, al fin y al cabo solo eran críticas constructivas, discusiones entre buenas personas.