100.000

En realidad aún no tocaba, se nos juntan las  fiestas, como si fuera tiempo de romerías en los pueblos, o un mes cualquiera de la vida de Pocholo. No acabamos de celebrar la navidad, y apenas cuatro meses después desde el aniversario, hace diez días llegamos a los 5.000 comentarios, y ayer alcanzamos las 100.000 visitas, nueva celebración. Casi ni pude disfrutarlo, duraron un segundo,  cien mil, ¡zas!, cien mil uno, cien mil dos...  Si, ya se que no somos el "Marca" ni "sexogratis.com", pero haber conseguido superar esa barrera, significa tocar la punta de una estrella como las que regala Michelín, o como las que lucen los famosos en el "Paseo de la Fama" de Los Angeles para darse postín. Pues así estamos, con nuestra estrella de plexiglás pudiéndonos tirar el pisto si queremos, pues esa cifra (ambas) supone que el roble que plantamos, metafóricamente hablando, está echando raíces hasta en la casa del vecino.

Ya podeis coger vuestras copas, las de cristal noble, las de la nochevieja, y brindar por todos nosotros si es que aún os queda alcohol, y ganas después de tanta fiesta. Para mi es un regalo de Reyes, un objetivo que da gusto alcanzar, por que llegar a las 100.000 visitas presupone que existe una inquietud alrededor de lo que ocurre en el Blog, y demuestra que, sin tener una 'lista negra' apuntándonos a la sien, somos capaces de contar muchas cosas sobre nuestro trabajo. Queremos expresarnos, informarnos, lo hemos hecho hasta cinco mil veces, lo hemos intentado otras cien mil. No cabe duda que queremos sobrevivir como personas en este loco mundo de magnitudes económicas.

Comentar en el Blog, siempre lo he dicho, es un sano ejercicio de expresión personal. Una fuga de los sentidos sometidos cada vez más al implacable agobio de los rankings.  Ha cambiado nuestro trabajo y nuestras vidas. La productividad, como un retrete con pirañas, nos ha obligado a estar en guardia, siempre atentos, mirando a diestra y a siniestra, como en los videojuegos de zombies, con el arma siempre cargada para ir sumando créditos. Los 'malos' pueden surgir de cualquier lado, creedme, y los buenos son menos buenos si no revientan las carteras de la gente con pepinazos del tamaño de paletillas.

Dentro de esta histérica situación, creo que el Blog es un arma fundamental para el futuro de los trabajadores, es un "asunto" que suena hasta en las catacumbas de la empresa. Me lo decía un ex-compañero: "Campsared tiene la ventaja (para ella) de ser una empresa muy fragmentada en la que los 4 o 5 trabajadores por centro apenas comparten experiencias con el resto por culpa de la distancia". En efecto, y este Blog es un vínculo de unión que no existía hasta ahora, Y cada vez somos más fuertes, lo seremos si agrupais nuestro esfuerzo,  si nos juntamos más y más gente para expresar lo que sentimos, lo que queremos. Construimos humanidad dentro del mecanismo tecnológico de esta gran empresa.  No formamos el corazón, que sabemos que es rígido y calculador, somos entrañas, somos sangre que corre libre por los vasos sanguineos, dando calor, alojados en algún rinconcito de esta gigantesca estructura. O tal vez los gusanillos de la gran manzana. En fin, estamos vivos.

FELICIDADES Y MUCHAS GRACIAS. 

Hala, a bailar